Tabasco cuenta con un potencial hidráulico que se caracteriza principalmente por sus dos vertientes. La primera corresponde al litoral, el cual tiene una extensión de 190.8 kilómetros en el Golfo de México. La segunda está constituida por un vasto sistema lagunoso estimado en 227 lagunas con 68,215 hectáreas de espejo de agua, de las cuales 23,000 pertenecen al complejo de lagunas costeras: Mecoacán, Tupilco-Redonda y Carmen-Pajonal-Machona.

Aunado a esto se encuentran los dos principales sistemas fluviales del estado, el del Grijalva y el del Usumacinta, que en su conjunto tienen una descarga anual de 92,285 millones de metros cúbicos. Representan aproximadamente el 30 por ciento de los recursos hidráulicos con que cuenta el país.